¿Sabías qué... mientras que en los restaurantes de España el agua se paga, en Japón es gratis?

Lo cierto es que el tema de cobrar o no por servir agua es algo polémico en el sector de la hostelería. Comenzando por la idea de que no existe un consenso, el llegar a un acuerdo es algo difícil, puesto que se da cierta autonomía a la bebida y el precio se deja a juicio del hostelero.

Habitualmente comer un menú en España te lleva entre los 9 y 14 euros, pero lo que es verdaderamente caro (sobre todo si elegimos la carta) son los complementos, entre ellos uno que causa revuelo es el agua. Hay mucha gente que para comer necesita acompañar su plato con agua y pan, pero mientras que se entiende que el pan tiene un precio, muchos se preguntan ¿por qué tengo que pagar por el agua, cuando pueden dármela del grifo? Existen numerosos restaurantes en Europa y en el resto del mundo, como Japón, donde el agua no se plantea como un gasto del cliente. No se trata de eliminar el consumo, sino el poder elegirlo, el poder decir “¡camarero! ¿puede traer agua?” y no tener miedo de pagar más ni de seguir tragando la comida como un pavo.

Sin embargo, quizás este planteamiento sea algo que nos habla también de una diferencia de costumbres y de maneras de ser de dos países. Aquí, la Asociación Empresarial de Hostelería de la Comunidad de Madrid afirman rotundamente que se debe cobrar por la jarra de agua (incluso las que se piden aparte del menú), y ya vemos cómo andamos con los bienes públicos; el sol se paga aunque generes energía con tus placas solares. Por otro lado, o mejor dicho al otro lado del mundo, en Japón se tiene una conciencia social más amplia, siempre se mira por el bien común, y el comer sin poder beber agua no se concibe ni en los restaurantes.

Dos mundos, dos conceptos. Ahondaremos cuestiones como estas en nuestro stand, ven a vernos a la facultad de Geografía e Historia de la USAL.